A San Sebastián
San Sebastián, patrón, soldado, centurión;
mártir por ser valiente, auténtico confesor.
Por no renunciar a la fe que del Evangelio viviste,
por ser un santo valeroso, honesto y coherente,
y mostrar con coraje tu fe evangélica de creyente.
Más fuerte que las flechas que hirieron tu pecho,
es el amor que tienes por los hombres;
salvando en las catacumbas de Roma,
a cristianos que huyen de las persecuciones,
de las fieras del circo y de sus tribulaciones.
Valiente y fiel compañero de combate,
eres el primero en desafiar el peligro,
para ti como cristiano no hay peor enemigo,
que satanás el maligno y sus ángeles caídos,
por enfrentarse a Dios con soberbia y desatino.
Condenado fuiste por testificar
ante los jueces, supiste ser íntegro y cabal,
por defender el amor la fe y la verdad,
a costa de sufrir asaeteado en un árbol atado,
y morir como un vil malhechor apaleado.
¡Oh San Sebastián Bendito!
cristiano comprometido,
ejemplo a imitar tu vida es.
Celebrado, venerado, admirado,
sostén de nuestra fe en la endeblez!
Celebrado, venerado, admirado,
sostén de nuestra fe en la endeblez!
¡Ahora y siempre seas por Fiñana
Patrón glorificado,
por los siglos de los siglos. Amen!
antonio gonzález padilla
antonio gonzález padilla
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