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viernes, 24 de junio de 2011

KANT: EL FUNDAMENTO DE LAS CIENCIAS FÍSICAS (ANALÍTICA TRASCENDENTAL) (CRP III)




Originalmente el mundo aparece como un conjunto de impresiones múltiples desordenadas e ininteligibles; pero es necesario comprender ese mundo caótico. Para ello, piensa Kant hay que referir tales impresiones a unos conceptos o categorías en los que aquellas se ordenan y se hacen inteligibles, a estos primeros conceptos los llama Kant conceptos a priori: no elaborados a partir de la experiencia (por la sencilla razón de que no habría experiencia sin ellos). Y este es el primer nivel de síntesis cuyo resultado son las PERCEPCIONES SENSIBLES. Con ellas el mundo caótico de la multiplicidad de impresiones se ha comenzado ya a ordenar y a estructurar en conjuntos inteligibles, en todos, en lo que llamamos vulgarmente cosas. Pero el proceso unificador de entendimiento solo se ha iniciado; ahora hay que continuarlo a niveles mas complicados de síntesis que terminarán produciendo el OBJETO DEL CONOCIMIENTO, es decir, el mundo de la física, perfectamente ordenado como un mundo de sustancias, de causas, de efectos, de leyes.... etc. (Las doce categorías kantianas).
Así que es tras la síntesis final del entendimiento cuando aparecen todos los principios que hacen inteligible la física; es decir, la naturaleza. Todos y cada uno de estos principios, sin embargo. constituyen las leyes fundamentales de nuestro conocimiento de la naturaleza. No son, por lo tanto, leyes de la naturaleza, sino de nuestro conocimiento de ella. Ya lo hemos visto al hablar del principio de causalidad: está basado en la categoría de causa que es un concepto puro del entendimiento, a priori de la experiencia. Por eso es por lo que la validez de este principio, no depende de la experiencia; es universal y necesario, en tanto que forma a priori que se tiene que aplicar forzosamente a todos los contenidos del pensamiento humano.
El problema de los diferentes niveles de síntesís y de las facultades que intervienen, es un problema complejo. Intentemos aclararlo. El entendimiento es el que asume el papel fundamental en la constitución de la objetividad. Se ha pasado de un extremo a otro: ahora “casi” se desprecia lo dado, que en otro tiempo era el portador de las formas (morfhés) que, tras el proceso abstractivo, se concebirían en el entendimiento çomo representaciones eidéticas (eidós). Pero  es el entendimiento el que actúa. Kant habla de tres fuentes o dotadas de espontaneidad a priori de forma que constituyen las condiciones de posibilidad de la experiencia objetiva en virtud de la síntesis. El primer nivel es el sentido; esta capacidad de aprehender, ya tiene una cierta espontaneidad (actividad constituyente); es decir, ya está dotada de estructuras a priori y ya efectúa una síntesis inicial que es la síntesis de las impresiones múltiples y desordenadas en la unidad de la percepción sensible Es decir, las percepciones sensibles que son las que se presentan, después, como materia ante la categoría del entendimiento para la síntesis definitiva, ya vienen organizadas y sintetizadas en unidades perceptibles, en virtud de la espontaneidad de las formas a priori de la sensibilidad.
Pero la sensibilidad, a pesar de todo, es aun el campo de lo pre-objetivo de lo precientífico. No hay ciencia de las percepciones sensibles, dado el compromiso de lo científico con la objetividad. Pero que quede claro que todo conocimiento objetivo (científico) ha de proceder de aquí, de este campo pre-objetivo que Kant llama experiencia originaria, en contraposición con la experiencia objetiva. Es importante hacer notar ya desde aquí que la objetividad no puede garantizarse solo desde la espontaneidad del sujeto; es necesaria la aportación de las percepciones sensibles, como materia. Esta es la fuerza del principio empirista en Kant -dado por Hume- y, por esto mismo, relegará a la metafísica a una dimensión extracientífica.
La objetividad es producto de la síntesis; pero la síntesis es un complicado proceso; no hay una sola, sino varias; tantas como elementos dinámicos en el sujeto. Está el nivel de la sensibilidad, el nivel de la imaginación, el nivel del entendimiento y el nivel de la razón.
Conviene, hablar algo del papel de la imaginación. La importancia del dinamismo imaginativo ha sido reseñada ya, por ejemplo al hablar de Hume. En Kant, tal y como refleja su obra, es una de las piezas más importantes, por su labor de, puente entre los diferentes niveles es, aunque al mismo tiempo, plantea los mas difíciles problemas de interpretación. Digo esto, porque el propio Kant en no pocas ocasiones, parece excluir el nivel sintético de la sensibilidad (la sensibilidad no seria espontánea y activa; antes bien, un nivel eminentemente pasivo y receptor) indicando que es precisamente la imaginación la que interviene en este nivel. Esto significa que la sensibilidad no tiene unos contornos clara y nítidamente definidos. La razón de ello está en el tiempo, que es forma a priori de la sensibilidad, constituye también el sustrato de la imaginación en el papel espontáneo y activo de ésta en la formación de las categorías del entendimiento (Imaginación como puente) . De este modo se puede decir que el TIEMPO, trasciende la frontera de la sensibilidad. Entonces, ya no está claro que haya una primera síntesis en la sensibilidad, porque al desdibujarse sus propias fronteras, como consecuencia de la trascendencia del tiempo, podría ocurrir que la espontaneidad y la actividad sintetizante que, sin duda, se opera en este nivel se debiese a la imaginación, eminentemente pasiva y receptora.
Es muy probable que Kant pensase que no hay una síntesis en la sensibilidad y otra en la imaginación, sino que es la imaginación la que interviene en el nivel de la sensibilidad, a través del tiempo, para sintetizar las impresiones múltiples y para constituir las percepciones sensibles como unidades perceptuales. Y, que todo esto, la imaginación lo haga en dos momentos: unificando según una ley la forma a priori (que será la estructura de la imaginación» en el primero, y, tomando conciencia de la unidad ya constituida, en el segundo. Así podríamos entender las tres síntesis de las que nos habla Kant con respecto a la imaginación: la síntesis empírica de la reproducción, la síntesis trascendental de la reproducción y la síntesis de la aprehensión.
En virtud de la síntesis de la aprehensión, tomamos conciencia de la diversidad sensible, como unidad. Realmente, así parece ser, porque nosotros tenemos conciencia de la realidad exterior como todos, como cosas, como unidades. La filosofía clásica, llamo a este proceso de considerando que era un acto del sensorio común. De cualquier manera, en lo que unos y otros parecen estar de acuerdo en que los sentidos solo nos informan de aspectos cuantitativos y cualitativos, nunca de cosas como unidades reales exteriores ni independientes de nosotros. (esto ha sido comprobado modernamente: Ley de la energía específica de los sentidos: Müller. Así que es necesario presuponer un nivel de espontaneidad, por encima de la sensación, que responda de esta coordinación que aglutina las sensaciones en figuras, en unidades con sentido, en conjuntos perfectamente definidos sobre el fondo oscuro e indeterminado de las impresiones brutas. Kant consideró que la facultad encargada y responsable de esta labor era LA  IMAGINACIÓN.  Aquí puede verse ya una anticipación de lo que será mas tarde para los psicólogos gestaltistas alemanes el factor formal G , que es el responsable de la figura que emerge sobra el fondo en toda percepción. Ph. Lersh, avanzando mas identifica este factor “G” con una protofantasía que se encuentra  relacionada con los procesos de la vida instintiva. (Quiero decir que los animales y los hombres (diferencias aparte), configuramos nuestro mundo en función de nuestras necesidades profundas. Recuérdese la famosa imagen de la T y la nuera. Pero para poder tomar conciencia de una unidad, es necesario que ésta, esté previamente constituida. Y esto es lo que acontece en la síntesis empírica de la reproducción y en la síntesis trascendental de la reproducción: por la primera se constituye la unidad y por la segunda se dispone de la regla a priori que determina el medio necesario de hacerlo; es decir, el funcionamiento de la imaginación en tal proceder.

En resumen las sensaciones (aspectos cuantitativos y cualitativos captados desordenadamente por los sentidos) se constituyen en unidad en virtud de la síntesis empírica de la reproducción en el nivel imaginativo, siguiendo una ley que determina a priori y de modo necesario el modo de hacerlo (síntesis trascendental de la reproducción) . Así, ya tenemos la unidad constituida: la percepción sensible. Pero aun no hemos tomado conciencia de ella. Esto se hace en virtud de lo que Kant llama síntesis de la aprehensión, que, es el segundo momento de la actividad de la que, lógicamente, es posterior a las anteriores síntesis imaginativas. Por lo tanto, no conviene hablar de dos síntesis: una en la sensibilidad y otra en la imaginación, sino de dos momentos de una única síntesis en el nivel imaginativo.
Por encima de estas síntesis, un tanto embrolladas, de los niveles inferiores, en las que, al parecer, el dinamismo imaginativo tiene un protagonismo indiscutible, aparece la síntesis capital del entendimiento. Este opera sobre las percepciones sensibles que, como todos, sintetizados ya, actúan como materia ante las categorías. EL OBJETO será ya el fruto de esta síntesis definitiva.
Las categorías del entendimiento, son formas de conceptuar y ordenar las percepciones sensibles. Tras esta síntesis, aquellas quedan ordenadas y relacionadas en unidad, pluralidad o totalidad, como pertenecientes a una clase de lo real o a otra (realidad, negación, limitación), como inherentes unas a otras o como independientes (sustancias y accidentes), como causas, o como efectos, como en comunidad de acción recíproca, como posibles o imposibles, como existentes o inexistentes, como contingentes o necesarias.
Y esta es la tabla de las categorías según las cuales, la experiencia, queda ordenada de modo necesario. Y Así. es como los objetos de conocimiento, frutos de esta última síntesis, reúnen ya las, caracteres precisos para ser objetos científicos. Sólo hacer notar que la constitución del objeto como síntesis, se realiza en el juicio, porque las categorías, -formas a priori del entendimiento-, no son otra cosa que las diferentes formas de juzgar.





miércoles, 22 de junio de 2011

KANT: LA ESTÉTICA TRASCENDENTAL (CRP II)



Como decíamos ayer, Kant no se limita a exponer que el espacio y el tiempo son formas  a priori de  la sensibilidad, sino que lo demuestra  mediante lo que él llama  la exposición metafísica del espacio y la exposición metafísica del tiempo, tratando de mostrar el carácter "a priori " del espacio/tiempo y el carácter "intuitivo"  de ambos.
Lo primero que hace, mediante un argumento negativo, es mostrar que espacio/tiempo no son "representaciones empíricas", es decir no pueden ser derivados de la experiencia como condiciones necesarias de ella. Supongamos que el espacio/tiempo derivasen de la experiencia, podríamos naturalmente formarnos su representación mediante un proceso de abstracción, así lo hacemos con cualquier concepto empírico. Para poder representarlo necesitamos las relaciones espaciales: "delante",  "detrás", "arriba", "abajo", Etc; Y las temporales: "ahora", "en este momento", "después",  o sea la sucesión y la simultaneidad. Considerando estas relaciones por sí mismas terminaríamos formando ambos conceptos. Pero es evidente la invalidez de  este razonamiento, porque representarnos algo como estando ahora y aquí, antes y después, delante y detrás, es necesario suponer de  antemano el espacio y el tiempo, porque tales relaciones son ya espaciales o temporales. Concluimos afirmando que la experiencia presupone el espacio y el tiempo como condiciones suyas, o sea que son a priori.

Dicho esto, Kant argumenta que el espacio y el tiempo son representaciones formales necesarias porque sirven de base a las intuiciones sensibles, las externas en caso del espacio, e internas/externas en caso del tiempo. Podemos pensar un espacio sin cosas, pero no cosas u objetos sin presuponer el espacio. Del mismo modo no podemos pensar un suceso sin presuponer el tiempo, sea interno o externo a nuestra vivencia. Esto demuestra que espacio/tiempo son condiciones de los objetos y no al revés. La conclusión es obvia: espacio/tiempo son a priori, condiciones de posibilidad de los fenómenos.

En tercer lugar demuestra que el espacio/tiempo son representaciones singulares, de un único objeto concreto, y no conceptos aplicables a varios objetos. Es una forma metafórica de hablar cuando afirmamos que hay varios "espacios" y varios "tiempos". Solo hay un único espacio y un único tiempo, ya que no existen distintos cursos temporales simultáneos sino solo diferentes momentos sucesivos. Espacio/tiempo son representaciones singulares, conocidas primariamente por intuición y no por conceptos. Son en definitiva el fundamento de lo que llamamos fenómenos.

viernes, 17 de junio de 2011

MANIFESTACIONES DE CIEGOS




Los acontecimientos sucedidos en los alrededores del  Parlamento Catalán y en otros lugares de España, es para reflexionar sobre lo que está pasando en nuestro país. El hecho de que un grupo de "indignados" o lo que sean, puedan impedir a los parlamentarios catalanes el acceso al parlamento para hacer su trabajo, y que hayan tenido que acceder al recinto el President de la Generalitat por medio de un helicóptero, y los diputados protegidos y escoltados por la policia, es como poco, bochornoso, bananero, y propio de un país que no respeta los derechos fundamentales de las personas, entre ellos, hacer su trabajo honradamente. Algunos justificaban dicha acción porque el Parlamento Catalán iba a recortar el 10% en sus presupuestos.
En España todo ciudadano tiene derecho a manifestarse donde quiera y por lo que quiera, respetando el ordenamiento jurídico que tipifica dicho derecho, delante de un parlamento y hasta del Palacio de la Moncloa; pero lo que no se puede hacer ni en España ni en ningún otro país serio de nuestro entorno, es impedir por la fuerza, el derecho a la libre circulación y al trabajo, porque eso es un delito tipificado en el código penal,  y por tanto ha de ser sancionado.
Otra cosa es que nuestro gobierno no esté por la labor. Ya el Señor Pérez Rubalcaba manifestaba que había que ser "prudente" con estos movimientos populares, aunque el exceso de prudencia suele terminar en inoperancia. Cobardía y cálculo interesado es lo que aplica nuestro ministro, haciendo dejadez de funciones y permitiendo, que grupos incontrolados tomen plazas, calles y acosen a nuestros representantes políticos legalmente elegidos por el pueblo soberano.El gobierno tiene la obligación de gobernar y hacer cumplir la ley, aunque ello conlleve un desgaste político. Si no quiere, no sabe o no puede, debe convocar elecciones para que otros lo hagan. Lo que no se puede hacer es mirar para otro lado. A los manifestantes  que gritan contra nuestros políticos "no nos representan", yo les preguntaría  que a quién representan ellos: solo a ellos mismos.
El bochornoso espectáculo de estos acontecimientos ha sido visto por medio mundo en las televisiones, y la imagen de España se ha deteriorado a cotas inimaginables. La crisis no solo es económica sino política e institucional, afecta a todas las esferas del Estado. Sirva como ilustracción lo que le sucedió a uno de los parlamentarios catalanes, invidente, que se ayudaba de su perro mascota para acceder al recinto. La chusma se lo impidió e intentó robarle el perro al grito de:  ! Colega, socializamos el perro porque todos estamos ciegos !

































































lunes, 13 de junio de 2011

KANT: LA CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA ( I )





Si Kant (1724-1804) a la edad de 57 años no hubiera publicado la CRP (1781), es posible que actualmente no pasase de ser un filósofo del que nadie conocería ni hablaría de él. Habría sido un pobre profesor, perdido en el anonimato de su ciudad natal de Königsberg. Pero la publicó, para beneficio de todos  los que amamos la filosofía.
¿Cuál es el problema que plantea ésta obra maravillosa? ¿Qué importancia tiene en la Historia de la Filosofía? Empecemos por el nombre un poco complicado. La palabra "crítica" significa, estudio profundo de las condiciones del conocimiento científico; consiste en revisar, profundizar y ver si la metafísica cumple los requisitos necesarios para ser ciencia, cuyo paradigma es la físico-matemática de Newton. "Razón Pura" se refiere a la facultad específicamente humana que tiene por objeto el conocimiento científico que precede a la experiencia. La palabra "pura" -es evidente que no tiene connotaciones éticas- sino referencias epistemológicas, en Kant quiere decir "conocimiento que precede a la experiencia", no contaminada por la experiencia sensible.
La divide en tres partes, correspondientes a las tres facultades: sensibilidad, entendimiento y razón. La Estética Trascendental estudia las condiciones sensibles del conocimiento y la posibilidad de los juicios sintéticos a priori en la Matemática. La Estética Trascendental estudia el entendimiento y sus categorías, como condiciones formales que hacen posibles los juicios sintéticos a priori en la Física.. Y la Dialéctica Trascendental estudia la razón y sus principios, así como la imposibilidad de los juicios sintéticos a priori en Metafísica.

La Estética Trascendental. También aquí el nombre puede confundir al lector. La verdad es que Kant emplea ciertas palabras dándoles un significado propio. La palabra "estética" no significa "teoría de lo bello" según Baungarten, sino teoría del conocimiento sensible, el conocimiento que hace referencia a la experiencia sensible. La palabra trascendental tiene varios significados pero yo me quedo con ésta definición: "Llamo trascendental a todo conocimiento que se ocupa en general no tanto de objetos, como de nuestro modo de conocerlos, en cuanto éste debe ser posible " a priori", o sea sujeto al espacio y al tiempo".

En ésta parte de la crítica  se desarrolla la teoría de la sensibilidad. La sensibilidad es la facultad encargada de recibir las impresiones sensibles, o sea la materia del conocimiento; Kant la define como "la capacidad  (receptivida)  de recibir representaciones por el modo como somos afectados por  objetos, llámase sensibilidad".  Según Kant, la sensibilidad humana tiene condiciones, ciertas formas  a través de las cuales intuye, y que hasta cierto punto configuran el objeto de la experiencia. Dos son las formas de la sensibilidad: el ESPACIO Y EL TIEMPO que son considerados como forma a priori de la sensibilidad en general. Así que el ESPACIO Y TIEMPO, no son nada material, real o exterior a nosotros mismos, sino el modo o la forma según la cual nosotros percibimos lo material. No proceden de la experiencia, sino que la preceden y la hacen posible como condiciones necesarias que son de toda forma de experiencia sensible. Son, por lo tanto, las condiciones formales necesarias de todo conocimiento sensible (tanto de la sensibilidad externa / espacio y tiempo/, como de la sensibilidad interna/tiempo.
Por esto Kant establece que espacio y tiempo son INTUICIONES PURAS; Es decir, no son conceptos del entendimiento, abstraídos de la experiencia. Espacio no hay mas que uno; no es un concepto abstracto predicable de varios espacios individuales. No procede de la experiencia sino que la precede como forma a priori de la sensibilidad humana. Por eso es una forma pura, porque al ser a priori, está vacía de todo contenido empírico, hasta que, dentro del proceso del conocimiento sensible, se rellena con las impresiones sensibles que son las que quedan ordenadas y estructuradas en estas coordenadas espacio-temporales. La Geometría y la Aritmética, son ciencias formales porque se ocupan del espacio y del tiempo que son formas a priori de la experiencia. Y son ciencias universales y necesarias porque sus juicios afectan a todas las realidades de la experiencia ya que todos se han de dar en las coordenadas espacio-temporales, puesto que espacio y tiempo son formas a priori de la sensibilidad.



martes, 7 de junio de 2011

LOS TRAPOS SUCIOS SE LAVAN EN CASA




Los trapos sucios se lavan en casa, dice un refrán español; en propia casa, no en casa ajena.Viene esto a propósito de las acusaciones entre los dos principales partidos PSOE y PP, sobre el modelo a seguir en la transición del poder en las autonomías y ayuntamientos. 
Ha sido en Castilla La  Mancha donde ha surgido la polémica, al denunciar el PP que hay un déficit de 7.OOO millones de Euros y que no habrá suficientes recursos para pagar la paga extraordinaria de los funcionarios. La respuesta del PSOE no se ha hecho esperar. Después de criticar duramente al PP, ha manifestado la precipitación del partido de la oposición sin la documentación necesaria para mantener ésta infundada acusación -a su juicio- y ha venido a decirle mas o menos, que los trapos sucios hay que lavarlos en casa. Según el PSOE, estas acusaciones hacen un mal a España ante la opinión pública, y en concreto, ante los mercados internacionales, desprestigiando a nuestro país, creando alarmismo  económico y encareciendo el crédito. 
Igualmente ha recomendado al PP, que esto que exige a las autonomías y ayuntamientos donde gobierna el partido Socialista, lo aplique a sí mismo en donde gobiernan los populares; dicho de otra manera, eso de la mota en ojo ajeno y la viga en el propio. Ya que, según los datos del Ministerio de Hacienda las comunidades que tienen mayores porcentajes de déficit y deuda son las gobernadas por el PP y que el Ayuntamiento de Madrid tiene la mitad de deuda de todos los consistorios de España.
Esto ocurre en un País cuya tradición democrática es muy reciente, y lo que se hace en otros países de nuestro entorno como algo normal -como lo exige el sistema-, aquí se torna un problema. Naturalmente que lo correcto  y democrático, es hacer una transición de poderes civilizada, clara y diáfana, sin poner trabas al que llega; facilitando toda la información necesaria para el buen gobierno.
Me parece una memez, en los tiempos que corren, apelar al patriotismo y la agitación de los mercados internacionales; como si estos fueran bobos y no supieran de qué pié cojeamos. Mejor estaríamos ahora, si el gobierno del Sr. Rodriguez Zapatero, no hubiera eliminado por ley el techo de endeudamiento de las CCAA; Claro, eran otros tiempos en donde nadábamos en la abundancia y creíamos ser ricos. Paralelamente el PP podría quejarse  del daño tan profundo que causa el PSOE, -en los mercados internacionales-cuando anuncia a los cuatro vientos que viene la derecha, franquista y casposa, algo así tan terrible como las siete plagas de Egipto.
Los trapos sucios se lavan en casa, pero en la suya propia. No en la casa de todos.



sábado, 4 de junio de 2011

CUANDO LA VERDAD IMPORTA UN PEPINO




Ahora resulta que los pepinos son inocentes. Entonces, ¿Quién o quiénes son los culpables de la crisis del pepino? Muy sencillo: la bacteria e.coli que le ha dado por mutar y de aliada del ser humano se ha covertido en enemiga hostil.
¿A quién le importa la verdad de esta epidemia localizada en Alemania?.No al gobierno de  Hanburgo del SPD alemán, y menos a una consejera   irresponsable que ha inculpado a los pepinos españoles, sin tener certeza absoluta del origen del mal, pecando de ligereza o imprudencia, sin prever las consecuencias negativas al sector hortofrutícola: agricultores, almacenistas, transportitas etc. Hasta que las evidencias han demostrado lo contrario: No procede de los pepinos españoles, y habrá que seguir investigando hasta saber su origen. ¿Qué sucede cuándo un mercado pierde la fe y la confianza en un determinado producto, que sabe es altamente pernicioso para la salud? Que se elimina del mercado y el tiempo dirá cuanto cuesta recuperarlo a su estado inicial. Hasta la fecha, la imprudente Consejera del Lander alemán, no ha dimitido.
El gobierno español tampoco ha estado a la altura de las circunstancias: Ha actuado tarde y sin reflejos. Preocupado en problemas sucesorios internos, su actuación ha sido lenta, torpe e inadecuada. Desde el primer momento de la acusación de Alemania, el Presidente y la Ministra de agricultura tenían que haberse presentado en Alemania y Bruxelas y sacar de los despachos a los responsables del ramo,traerlos a España y demostrar "in situ" que nuestras hortalizas gozan de buena salud. Unas llamadas telefónicas a tiempo ejerciendo presión, no hubieran estado de mas; evidentemente, hay que saber a quien llamar. ¿Existe esa agenda telefónica?¿Tiene nuestro gobierno suficiente influencia para ejercer ésta presión allí donde corresponda? ¿Qué hay detrás de todo esto?¿Por qué los alemanes la tienen tomada con España? Demasiadas preguntas y pocas respuestas. Lo cierto, es que ha pagado el pato quien menos culpa tiene.
El desprestigio y ninguneo del gobierno español en Alemania y en las instituciones europeas, fruto de una política exterior nefasta, que ahora pagamos todos -aunque algunos mas que otros- por falta de liderazgo e interinidad del gobierno actual. A España no se le toma en serio: hemos perdido autoridad, prestigio, poder. Hace unos años Alemania tuvo problemas con el cerdo blanco, por alimentación inadecuada de piensos contaminados, e inmediatamente se remedió con una partida de 65millones de euros y medidas proteccionistas, para la recuperación del mercado aleman. Lo cierto es, que  el mal ya está hecho, y ahora toca reparar el daño causado a nuestros agricultores, por parte de Alemania a través  de Bruxelas: reparación del daño moral, compensación económica y la completa recuperación de los  mercados a su origen. ¿Cómo se conseguirá todo esto? Difícil respuesta. El tiempo dará o quitará razones.
Con ser esto importante, no podemos olvidar a los 19 muertos causados por esta epidemia, y las consecuencias que para las personas puede tener. Las autoridades están obligadas a explicar con claridad a la opinión pública, qué está susucediendo, atajando el problema en su justa medida, evitando alarmismo social, ya que el problema sobrepasa las fronteras de la UE para convertirse en algo muy serio. Si así no lo hicieren, podríamos pensar que la verdad les importa un pepino.