Translate

lunes, 25 de junio de 2012

In Memoriam


                                                    

                                                        
                                                          
                                                           

"Video meliora proboque deteriora sequor," (veo lo mejor pero hago lo peor).  Ahora mismo, querido lector, no sé si hago lo mejor o lo peor en escribir sobre el latín y su defunción en los planes de estudio. Una de las riquezas más significativas que muchos no alcanzamos a valorar es nuestra lengua. Hablo del castellano, el idioma de Castilla y actualmente llamado Español. Amar, conservar y defender nuestra lengua , es deber de todo español que se precie de serlo. Pero, hoy quiero rendir tributo a la lengua madre del español, el latín, y de muchas otras llamadas lenguas romances.
Super valorado en los tiempos del Franquismo y casi eliminado de nuestros actuales planes de estudio, el latín, ha pasado del todo a la nada. Ni tanto ni tampoco. La lengua madre de nuestra cultura hoy se encuentra en horas bajas y lamentablemente a punto de desaparecer. Será un ministro (sirviente en latín) quien después de presentar unas frías estadísticas decretará su eliminación. Para ello dejará de escuchar el sabio argumento de un magister o (maestro en latín, "mas" frente a "menos"). Hoy, así son las cosas.
Recuerdo con nostalgia aquellas clases de latín en el Seminario Menor de la Inmaculada de Almería. Al principio, no entendía por qué había que estudiar una lengua, que no se hablaba en ningún lugar y cuya utilidad nunca comprendía. Tampoco entendía que antes de traducir había que ordenar las oraciones, que para aquellos dichosos romanos el orden era el desorden. Las declinaciones con el "rosa rosae" eran un misterio y un suplicio chino. Las clases con Don Eduardo eran todo menos aburridas y distraídas. En torno al profesor, sentado en su tarima, la clase  se dividía en dos grupos de alumnos, que en orden y de pie con el libro de las Catilinarias de  Cicerón y de Tito Livio, nos jugábamos el ser o la nota de cada día. Nada de distracciones; ante una pregunta de dativo o genitivo o de ordenar correctamente el texto, para después traducir, iba corriendo la pregunta de alumno en alumno hasta que alguno, atinaba con la respuesta correcta. Automáticamente se adelantaba a los demás y se ponía el primero. Y así durante toda la clase. La nota, evidentemente estaba en función al orden establecido al final de clase. Recuerdo un mal día, cuando me sentía seguro de los primeros puestos y de tener una excelente nota, me encasquillé con un tiempo verbal y no daba pie con bola. La manaza del profesor cubría todo el libro a la vez que me preguntaba por un adverbio que yo no descubría en el texto;  la pérdida de mi posición privilegiada fué todo uno, mientras la voz de  Don Eduardo resonaba amenazante en mi interior. !jamás odié tanto el latín, como en aquel día! y sin embargo,  hoy lo adoro.
El latín se comenzó a hablar en el siglo VII -en números romanos el 7º- antes de Cristo; a escribir dos siglos después. Su importancia -como idioma científico- duró hasta el siglo XIX. Fué el idioma oficial de la Iglesia Católica y el idioma vehicular en la que se configuró Europa y la cultura occidental. Su valía y utilidad está fuera de toda duda. Tiene que encontrar su verdadero lugar en nuestros planes de estudio. Sirve para conocer la etimología de  la mayoría  de palabras de nuestra lengua -junto con el griego- y para dominar el Español de forma útil y fluida. No hablemos para estructurar la mente en el acceso a la universidad Sin el conocimiento del latín, la mayoría de los monumentos de piedra y placas conmemorativas, no nos dirían nada. En el campo jurídico, es indispensable, gracias al Derecho Romano; "In dubio, pro reo" ( En caso de duda, a favor siempre del reo). o ésta ya famosa  "Excusatio non petita, accusatio manifesta" ( Excusa no pedida, acusación manifiesta), etc. No digamos en el lenguaje sexual -el latín nos ayuda a emplear términos que en nuestra lengua son escabrosos,-  y que bajo el cultismo de la "lengua oral", quedan muy apropiados. Emplear la palabra "a priori" o "a posteriori", en una conversación, nunca queda mal. Si a eso añadimos "El carpe diem", sobre el disfrute en este valle de lágrimas, no me negarán su utilidad. Hasta para criticar al gobierno, podemos emplear las palabras de Cicerón en el Senado Romano: "Quo usque tandem... abutere patientia nostra" (Hasta cuando... políticos, banqueros etc,  -aquí cave todo el mundo-  van abusar de nuestra paciencia?).
Cuentan las malas o buenas lenguas -depende de quien las use- que en tiempos de Franco el Ministro Secretario del Movimiento José Solís -el que tiene nombre de mayonesa- defendía un proyecto de Ley para aumentar el numero de horas dedicas al deporte, en detrimento   del estudio de las lenguas clásicas, del latín concretamente. En medio del discurso se preguntó "¿porque en definitiva para qué sirve hoy el latín?" Don Adolfo Muñoz Alonso, natural de Valladolid, profesor de la Universidad Complutense y amante de la cultura, no pudo contenerse y desde su escaño increpó al Sr. Solís "Por de pronto, señor ministro, para que a su señoría, que ha nacido en Cabra, le llamen egabrense y no otra cosa." (entiéndase cabrón).




viernes, 22 de junio de 2012

IKER CASILLAS


 "Espero que se acuerden de mí por ser buena       
  persona y no por mis paradas"

                                                                                        IKER CASILLAS


Que el fútbol es un fenómeno social,  nadie lo duda. La globalización y los medios de comunicación hacen de este deporte un fenómeno de masas que trasciende fronteras, culturas razas y religión. El ser humano se socializa y aprende imitando a los otros. Así lo hacemos cuando somos niños asumiendo  los roles de nuestros padres y seres cercanos. Cuando eramos niños jugábamos en los recreos del colegio partidos de fútbol y recuerdo que todos, éramos Dis Stéfano, Gento, Zarra, etc,., queríamos ser como nuestros héroes,a pesar que nuestros campos eran de tierra y el balón no era reglamentario; !la imaginación al poder!.
Iker Casillas es el hijo que todo padre querría tener y todas las madres querrían como marido para sus hijas: Inteligente, rico, guapo y triunfador en la vida. Nacido en una familia de clase media en una ciudad dormitorio de Madrid y perteneciente a la cantera del Real Madrid, es el ejemplo vivo de como se puede llegar a ser grande como portero del RM y de la Selección española, mediante el esfuerzo, el mérito y el trabajo. Nadie le ha dado nada y todo lo ha conseguido por su constancia y buen hacer. Considerado como uno de los mejores porteros de fútbol del mundo, y teniendo todas las cartas para estar orgulloso por su trabajo, cuando se le pregunta por el mérito de sus paradas frente a Croacia, le quita mérito e importancia, compartiéndolo con el resto del equipo, "El triunfo es de todos, del equipo" -le dice a J.F.Diaz del Confidencial Digital-  Y continua "Espero  que se acuerden de mí por ser buena  persona y no por mis palabras". !No lo dudes, chaval, tu grandeza está en tí mismo! Pues eso, !ojalá nuestros jóvenes te imiten no solo como portero, sino como persona!

martes, 19 de junio de 2012

Los Ciclos de la Historia



               "Todo vuelve  y retorna eternamente,
                 cosa  a la que nadie  escapa"
                  
                                       Friedrich Nietzsche


Cuando España vive momentos de zozobra e incertidumbre y cunde el pesimismo, es necesario apelar al sentido común y no perder la esperanza. La historia se repite cíclicamente, como ya pronosticaron los clásicos griegos, Hesíodo  (Los trabajos y los días) y Platón sobre el mito de la edad de oro. También en Oriente se desarrollaron teorías cíclicas de la historia en China (Teoría del ciclo dinástico), así como en el mundo Islámico con Ibn Jaldún. El Cristianismo, sin embargo, desarrolló una teoría lineal de la historia basada en el judaísmo bíblico del Antiguo Testamento, situando a Jesús de Nazaret, como el acontecimiento más importante de la historia entre el alfa de la creación y el omega del fin del mundo.
Si como afirma la Bíblia, hay tiempo de vacas gordas y de vacas flacas, lo importante ahora es relativizar las decepciones y comprender que la escasez y la abundancia se suceden en ciclos a lo largo de la Historia. El hombre es un ser contingente y su vida también. Mil peligros nos acechan; de hecho "la vida  del hombre -según Kant- es pasar una mala noche en una mala posada". Pasa como con la edad, cuando cumplimos 40 años, nos apesadumbramos y hasta tenemos depresiones; ahora con  50 o 60 años, añoramos los 40. Hemos vivido la época más esplendorosa y de bienestar de nuestra nación en toda su historia; ahora no nos gustaría vivir como lo hicieron nuestros padres en las posguerra. Hoy, afortunadamente, no estamos como entonces, pero debemos tomar conciencia de que todo puede suceder.
Como profesor, siempre he vivido modestamente, sin grandes altibajos. No le he dado mucha importancia a mis finanzas, así que he soportado estoicamente las alzas y las bajas, siendo pariente cercano a  "penia" (escasez) y educado en la pobreza, primero, profesando el voto de pobreza como religioso y posteriormente como algo que ha imprimido carácter en mi forma de vida. Mis comienzos en la enseñanza fueron de tal precariedad económica, que algunos amigos y familiares se reían del precario salario recibido, después de tantos sacrificios de estudio y oposiciones. Comparado con otras profesiones u oficios, siempre salía perdedor. Mis hijos, no entendieron tanto esfuerzo y dedicación al estudio, para tan exiguo salario; ninguno se hizo profesor, conocida la experiencia de su padre. En Francia conseguí juntar una cierta suma de dinero que me alejaba de la pobreza y me acercaba a la riqueza, lo que me llevó a cuestionarme que algo estaría haciendo mal para que me ocurriese tal cosa. La flexibilidad de adaptación en el extranjero, me sirvió para saber que no debemos instalarnos en ninguna parte, pues ciudadanos del mundo somos -decía Séneca- y nada nos pertenece; somos pasajeros en el eterno devenir del tiempo.
Hoy me vienen a la memoria las palabras de un filósofo por el que siento un cierto aprecio, Nietzsche y el Eterno Retorno. Sus palabras resuenan hoy más que nunca "!Todo vuelve y retorna eternamente, cosa a la que nadie escapa!" ¿Es una pesadilla, una calle sin ninguna salida? ¿Estamos atrapados en un destino ya totalmente escrito que se repite una y otra vez (como un libro cíclico, el que termina con su principio, y empieza con su final) , sin descanso alguno durante el infinito? Algo así fue lo que pensó Nietzsche. ¡ Y si fuere cierto! ¡Hagamos de esta pesadilla la construcción de nuestro mayor sueño, "vivamos de manera tal que deseemos volver a vivir", pues "mirémonos frente a frente, somos hiperbóreos ", hagamos todo de manera tal que nos acerquemos los más posible a la perfección, tal vez así, tallando precisamente con el cincel de la persistencia reproduzcamos la puerta de salida, atravesemos el umbral, en aquel punto exacto donde se halla la salida del círculo: "el mediodía que es también mi medianoche ". !Amemos el mundo tal como es!: hermoso, cambiante, esperanzador, contingente, como la vida misma; en la abundancia y en la escasez, en la salud y en la enfermedad. Porque amar el cambio,  es amar la vida. Sólo así viviremos desarraigados y ligeros de equipaje, para no tener que pagar a plazos el precio de nuestra ruina. 



lunes, 18 de junio de 2012

PARADIGMA



                                                      "Yo soy yo y mis circunstancia, 
                                             y si no  la salvo a ella no me salvo yo"           


                                                                                    José Ortega y Gasset.


Cada uno de nosotros cuando nace no tiene que inventar su mundo. Éste está constituido por una serie de parámetros ajenos a nuestra voluntad. El modelo en el que desarrollamos nuestra personalidad está hecho. Los griegos lo llamaban paradigma, ejemplo, modelo, entorno o circunstancia, que va a ser determinante para nuestra identidad personal. En las ciencias sociales, el paradigma se encuentra relacionado al concepto de cosmovisión. El concepto se emplea para mencionar a todas aquellas experiencias, creencias, vivencias y valores que repercuten y condicionan el modo de ser de una persona y que actúa en función de ello Esto quiere decir que un paradigma es también la forma en que se entiende el mundo. Por ello nuestro mundo se configura mediante la educación recibida, las creencias religiosas, familiares, políticas y económicas, que son las que moldearán nuestra forma de ser más de lo que a primera vista pudiera parecer. La prueba es evidente: la mayoría de la gente que nace en un determinado lugar habla el mismo idioma, tiene las mismas creencias religiosas, defiende una determinada cultura, una determinada política, y hasta siente la misma afición deportiva por un determinado equipo, etc., lo hacen desde un mismo paradigma. 
Esto es debido a que normalmente no elegimos nuestras creencias, que condicionan nuestra  forma de comprender la vida, nuestros valores, que influyen en nuestra libertad para elegir, nuestras  aspiraciones que marcan la meta a la que queremos llegar, nuestras prioridades, que manifiestan lo que consideramos más importante. Todo este conjunto o trasfondo donde discurre nuestra vida lo llamamos paradigma o circunstancia. Sería, algo así, como la forma en que comprendemos, sentimos y valoramos el mundo, desde nuestra mismidad, y por  la que pensamos tener cierta certeza de ser felices.
Estas cincunstancias serán determinantes para establecer el horizonte de nuestros deseos y aspiraciones, de tal manera, que el mundo lo veremos bajo el prisma que ellas nos configuran siendo raiz de nuestros estados de bienestar o malestar. Por eso, Ortega nos advierte que "si no salvo mi cicunstancia no me salvo yo".
¿Existe la objetividad? Esta pregunta es obvia, si admitimos que todo lo que comprendemos lo hacemos bajo el prisma de nuestra circunstancia o de nuestras emociones, de tal manera que cuanto más identificado esté con algún acontecimiento, mas suceptible de ser deformado lo veré. No, no existe la objetividad, sino la perspectiva que para cada uno es diferente, desde su propia subjetividad. Tener esto en cuenta es muy importante para el diálogo con los demás y para superar viejos dogmatismos, por una parte, y el relativismo por otra.




viernes, 8 de junio de 2012

LA MERENDICA DE ABLA





El refranero del pueblo nos dice que "cada vez que viene un hijo lo hace con un pan debajo el brazo". No le faltaba razón en una época de la postguerra donde siempre eran bienvenidos brazos para segar o trabajar la tierra. La Iglesia como comunidad, festejaba el evento mediante la inmersión en el agua con el bautismo, a la vez que lo hacía  la familia con un ágape. En todos los acontecimientos importantes que jalonan la vida de un hombre, está la comida presente como un elemento que traspasa la función biológica del mantenimiento, para adquirir una simbología antropológicamente social. Es el rito de incorporación o pertenencia a un grupo que lo identifica como miembro activo con el rango que le pertenezca por derecho propio.
Las sociedades tradicionales con una economía casi de subsistencia comían lo que producían, en relación con la época o estación del año. Ahora bien, era en la fiesta cuando todo lo mejor de la producción de la casa era consumido y con abundancia. El ágape festivo aún es un importante exponente de la fiesta en nuestra casa, la gastronomía cultural es un buen exponente de ello, de comidas típicas y tradicionales. La excusa de la celebración, sea cual sea, se hace alrededor de una mesa.
La fiesta, que es sinónimo de celebración, ha ido evolucionando. Es en ella misma el mejor mestizaje de cultura humana, que se adapta a los tiempos y a las ideas. Cada colectivo la ha hecho suya, dándole identidad y forma. Hay una fiesta para cada edad y una edad para cada acto festivo. Hay fiestas íntimas, fiestas familiares, fiestas particulares y fiestas abiertas, fiestas populares y fiestas institucionales; cada colectivo tiene o puede tener fiestas (y sería bueno que tuviera); es una herramienta socializadora y de integración, da al grupo social sentido de colectivo, nos ayuda a orientar nuestras vidas y nos permite conocernos y reconocer a los que nos rodean. La fiesta es la válvula para escapar de la presión cotidiana en la vida del ser humano; es la liberación de las tensiones individuales y colectivas, herramienta clave para mantener el equilibrio social.
Por ello, cuando nos fijamos en cualquier cultura o sociedad, sus actos festivos llegan a ser color, forma, olor, sonido, gusto y imagen de lo que son, de lo que han sido y de lo que aspiran a ser, como colectivo. El calendario festivo y el estilo de fiesta son el espejo de historia, de talante y de carácter de aquella sociedad; son, al mismo tiempo, resumen de la transformación que con el paso del tiempo, aquel pueblo o grupo social ha ido haciendo sobre un territorio y sobre ellos mismos como grupo, haciendo servir y aprovechando lo que el entorno ya les daba de por sí.
La Merendica es una fiesta entrañable que se celebra en la primavera de Abla, asociada a las primeras comuniones de cada año, el sábado previo al domingo de Pentecostés. La recuerdo con especial cariño, cuando todo el pueblo se reunía a comer por familias en el entorno de "vista Alegre", debajo de olivos frondosos a la vera de la carretera. No se conoce el inicio histórico de ésta fiesta -al menos, yo lo desconozco- pero puestos a elucubrar, podría estar asociada a la fiesta que organizaban las familias cuando uno de sus miembros hacía la primera comunión. La forma natural de celebrarlo, no era asistir a un restaurante -en aquellos tiempos no los había- sino asociarse al espacio natural, en comunión con la madre tierra, para disfrutar con toda la familia y comer los huevos cocidos, el conejo en salsa o en "fritá", el jamón, salchichón, chorizo, queso y otras viandas, producidas en el entorno doméstico; y como postre el pan de aceite con la onza de chocolate. La primera comunión es otro rito religioso de entronización en la vida adulta del niño, que deja de ser inocente para convertirse en adulto y ser responsable de sus actos. Es la incorporación del niño al mundo moral,  su autonomía,  libertad y responsabilidad. Es un paso decisivo para su vida de adulto. Para su incorporación posterior al mundo del trabajo. Nada diferente de lo que en otras culturas y tribus acontecía, como lo demuestran los estudios de los antropólogos Margaret Mead y Ruth Benedit.
Aunque para mi, la Merendica, tiene un significado muy especial. Asociada a tiempos de escasez, era el día en el que disfrutábamos de la comida preparada con esmero por los padres y tíos. Y no era una comida cualquiera. Para empezar, no había olla, trébedes o caldo que se pareciese. Era romper con la monotonía diaria de un pueblo en el que no acontecía nada extraordinario. Era la comida de la solidaridad y el hermanamiento, donde cada uno aportaba lo que tenía y lo compartía con otros cercano o lejanos, daba igual. Era la fiesta donde las clases sociales se igualaban  a ras de suelo y las diferencias se difuminaban, simbolizadas en un ajedrez de manteles multicolores extendidos por el campo. Es posible que hubiera cierto pique con el mejor mosto o el mejor jamón, pero esto lejos de separar, unía a familiares, amigos y conocidos. !Jamás comí un queso de cabra tan bueno como el de la merendica! !Ni helados tan gustosos al son de los pasodobles de la banda municipal!
Cuando la tarde caía, saciados y satisfechos, los amigos y familiares iban de olivo en olivo a visitar a sus parientes, para darle el último tiento al jamón y al vino. Aquella gentes sencillas de agricultores, se deseaban los mayores parabienes y buena cosecha, tal vez sin recabar que nunca la naturaleza estuvo tan cerca, ni los productos de la tierra tan próximos, que en el sencillo acto de comer, e incorporar a su cuerpo, aquello, que previamente había germinado como fruto de su trabajo.




miércoles, 6 de junio de 2012

EL MONTE DEL GOZO




La mayor alegría de un peregrino es llegar a su destino, después  de superar muchos impedimentos. Se hace realidad un sueño, se acaba un reto iniciado días atrás, se consuma una aspiración deseada. 
La etapa Pedrouzo-lavacolla-Santiago se hace interminable, por lo cercana que se encuentra la meta y parece que no llega el final.  Nosotros la hicimos desde lavacolla a unos 9 kilómetros de Santiago saliendo desde el Pazo Xan Xordo con dirección al Monte del Gozo. En la medida que nos acercamos a Santiago el camino se llena de peregrinos, que en interminable procesión se van agrupando por zonas más pobladas y menos boscosas. El nerviosismo crece en la medida que nos acercamos al Monte del gozo, después de subir una pendiente que nos pareció interminable. Por fin llegamos a nuestro destino, contemplando ante nuestros ojos las torres esbeltas de la Catedral de Santiago y la ciudad postrada a sus pies.
Allí, como testigo mudo, no pude menos que vivir con el poder de la imaginación, aquellos momentos en la piel de un peregrino de la Edad Media, después de recorrer miles de kilómetros, sorteando peligros y vicisitudes en el camino. La alegría y la satisfacción de ver cumplida mi promesa, me embargaba en un estado de plenitud que no sabría explicar. La ciudad nos daba la bienvenida, con un sol radiante y un cielo azul, impropio de estas  tierras, o al menos así me lo parecía a mi.
Ya en la ciudad, no necesitábamos seguir las indicaciones hacia la catedral, bastaba seguir a los peregrinos que afluían del Camino, para llegar al destino. Eran las 13'30 cuando al son de las gaitas, entramos en la Plaza del Obradoiro. La imponente mole barroca de sus torres, nos recibía dibujando su silueta en el azul soleado de la tarde santiaguina. En contraste, el Palacio de Raxoi de estilo neoclásico, símbolo del poder político, junto con el Hostal de Los Reyes Católicos de estilo gótico isabelino y  el Colegio renacentista de Xan Jerone, sede  de la Universidad de Santiago, forman un conjunto  monumental testigo del esplendor histórico de la ciudad.
El abrazo obligado a la imagen de Santiago en su camerino y la misa de los peregrinos del día siguiente, cierra nuestro periplo por estas bonitas tierras. No si antes,  invitar a todos los que nos seguís a hacer el Camino, con la certeza que descubriréis nuevas experiencias que os enriquecerán.

martes, 5 de junio de 2012

SANTIAGO: "CAMPO DE ESTRELLAS"




De siempre el hombre se ha orientado en la tierra mirando al cielo. Los astros han sido siempre sus fieles aliados para dirigir el rumbo y finalizar con éxito los viajes emprendidos y las grandes empresas. La posición de las estrellas ha servido de referente y de luz en el largo obscuro túnel de la historia, no sólo para posicionarse y saber dónde estamos, sino para orientarse y saber dónde dirigirse. El hombre es hijo híbrido de Cielo y Tierra.
Desde la Edad Media, la tumba del Apóstol fue un referente que alumbró a la Europa cristiana como símbolo motivacional para consolidar la hegemonía de la cultura cristiana en Europa, frente al peligro del Islán, y salvar así el  legado clásico recibido de nuestros antepasados.  Es un reconocimiento y una deuda que tiene el mundo civilizado occidental con el cristianismo, y la contribución para éste fin que representa el "camino de Santiago", como elemento dinamizador de cohesión en una sola fe de los diversos pueblos de Europa. 
Hay serias dudas históricas sobre la tumba del Apóstol en Santiago de Compostela. Hasta la etimología del nombre de "Compostela", crea controversias. Pero lo de menos es la certeza histórica de la leyenda del Apóstol, lo demás es la creencia de todo el pueblo cristiano, que hizo de la peregrinación un acontecimiento histórico de integración y cohesión, que trascendió pueblos y fronteras con connotaciones religiosas, culturales, económicas y sociales. Y eso es lo que vale: lo que yo personalmente he vivido, junto a mi familia, y que quiero compartir con todos vosotros.

Reiniciamos el viaje desde Ponferrada (León) y después de un descanso reparador en el Hotel "El Temple" y desayunar en compañía de unos amigos de Madrid, tomamos dirección hacia la tierras de Lugo, con la incertidumbre de aguantar a pié nuestros primeros veinte kilómetros  entre Becerreá y Sarriá.  La lluvia nos  impidió tan loable propósito y sólo se quedó en diez kilómetros; para nosotros fue un motivo de alegría ver como habíamos superado el primer obstáculo.
La Pensión AS RODAS (Las Ruedas), nos esperaba con los brazos abiertos. El dueño, un señor  joven, nos dio la bienvenida invitándonos a un albariño que nos supo a gloria, en aquel lluvioso día gallego.
A las ocho de la mañana, todos en pié para desayunar y empezar una nueva etapa entre Sarriá y Porto Marín de 24 kilómetros. Reiniciamos el camino en las afueras del pueblo de Sarriá, entre una tupida selva boscosa y las primeras pendientes que hacían fatigoso el andar. Superadas las primeras dificultades, se llega a una planicie morfológicamente menos agresiva y de horizontes más amplios, gratificada con el encuentro de peregrinos de todas las nacionalidades, y alguna que otra casa-bar para beber y reponer fuerzas.
Era nuestro bautismo de inmersión en el camino. La diversidad de gentes y de paisaje, hacían que todo fuera más fácil. La sonrisa y la solidaridad de gentes tan diversas y de diferentes culturas y procedencias, hacían la comunicación, humana, cálida y sencilla, sin que la barrera del idioma fuese un impedimento infranqueable: bastaba la mirada y sobraban las palabras. Disfrutábamos de la empatía natural del compañero de viaje, sin ni siquiera saber su nombre: no lo necesitábamos. "Buen camino, peregrino", era el saludo franco y espontáneo que surgía en nuestros oídos, de gargantas cansadas por el esfuerzo, animándonos mutuamente para luchar contra el espacio y el tiempo. Eso, y los mojones que de forma monótona se alinean por el camino, marcando la distancia de mas a menos, entre un sitio determinado y la ciudad de Santiago, era acicate complementario para superar pequeñas metas.
Durante el camino, había momentos para todo, como la vida misma. Para el encuentro, como tener la suerte de encontranos con las Chicas  Canarias de Tegueste. La alegría y la gracia personificadas de Mary Hernández, Pili y la Mamá de Imanol, eran contagiosas. De lo más sano y mejorcito del camino... Nunca quedábamos, pero siempre nos encontrábamos inesperadamente en cualquier lugar del camino, celebrando nuestro encuentro con una copa de albariño o ribeiro. Su magnifico reportaje fotográfico del Camino, lo recomiendo: aficcionteguestera3.blospot.com !Un saludo y un abrazo afectuoso, compañeras de camino!
También para el recogimiento, la meditación y el recuerdo. Señales, pequeños montículos de piedras y fotos de personas jalonaban su identidad a lo largo del trayecto. De vez en cuando una pequeña iglesia o capilla, adosada junto al cementerio, eran testigos mudos, cómplices del silencio interior de los caminantes y de sus mundos separados por el tiempo. Silencio roto por un riachuelo travieso y alegre de agua cristalina, que entre piedras, musgos y líquenes, seguía su cantinela ruidosa al margen de los peregrinos, perdido entre la maleza hacia no se sabe dónde.
El viento, la brisa, la lluvia nos sonreían o nos amenazaban, ajenos a nuestras cuitas. El sol, la luz, el frío , el calor, amigos inseparables según gusto y condición, eran el trasfondo de nuestro esfuerzo. Las vacas, ovejas y caballos, también eran testigos ajenos a nuestro caminar, ocupados en comer placenteramente en el prado, parecían ser más libres que los humanos, si no fuera porque  su conducta era debida al férreo yugo del instinto determinista.
Y así, poco a poco y día tras día, fuimos quemando etapas: Porto Marín-Palas de Rei; Palas de Rei- Melide; Melide-Pedrouzo; Pedrouzo-Lavacolla; Lavacolla -Santiago.

lunes, 4 de junio de 2012

CAMINO (II)




Visita obligada, camino de Santiago por la campiña riojana, es el Monasterio de Yuso o Suso, cuna del Castellano o Español en San Millán de la Cogolla. Entre parajes quebradizos,  boscosos y viñas, resuenan las palabras balbucientes  de un monje anónimo entre latín y un incipiente castellano mezclado el uno con el otro, formando una semejanza como la del hijo al padre; es un canto dirigido a la Santísima Trinidad para que el pueblo pueda entender lo que rezaba. En la sencillez y austeridad de aquellas paredes y entre grandes libros corales, se esconde parte de nuestra identidad como pueblo.
Luego, de paso, un alto en el camino en Santo Domingo de la Calzada para contemplar su catedral y su torre barroca para después llegar a Burgos, no sin antes pasar por el yacimiento de Atapuerca, divisando en el horizonte la silueta  de las torres-agujas de la Catedral Gótica de la ciudad castellana, la Capilla del Condestable, la Cartuja de Miraflores y Las Huelgas. Mucho gótico puro, demasiado atracón para digerir en un solo día, gótico flamígero o isabelino, barroco...pero las exigencias del guión así lo establecía.

  1. Pero si Burgos es la expresión pura del gótico tardío, León es la exaltación del gótico puro de la esbeltez  de su catedral y el juego de luces y sombras de sus vidrieras. Su interior es un libro abierto que se lee al compás de la la luz desde que amanece hasta que anochece, por medio de miles de representaciones dibujadas en sus vidrieras policromadas, que recobran vida cuando la luz del sol calienta sus huecos de piedra tallada en arcos ojivales, mostrando al espectador -asombrado  por su belleza- los misterios de la religión y las costumbres de la  época. Todo para la mayor comunicación del gótico con el pueblo, frente al románico escueto y desnudo para mayor recogimiento de los fieles.  Destacan el gran rosetón central situado en el pórtico, entre las dos torres de aguja, y los rosetones del transepto norte y la capilla de Santiago. Sus arcos ojivales y sus bóvedas de crucería hacen de esta catedral el símbolo por excelencia de la Jerusalén celestial. Es la piedra la que emerge de la tierra, como mano abierta hacia el cielo, o tal vez el cielo que baja para acampar sobre la tierra. Si alguien quiere imaginarse el cielo, ya tiene el modelo.