El Congreso rechaza dividir la Soberanía Nacional del conjunto de los españoles

El Pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado este martes con los votos de PP, PSOE, Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Foro Asturias y Unión del Pueblo Navarro, (86% de votos) tramitar la proposición de ley del Parlament que pide al Gobierno la competencia para poder celebrar la consulta separatista.
Ayer fue un día especial para muchos españoles que amamos a nuestro país. Nuestros políticos estuvieron a las alturas que requerían las circunstancias. En el templo de la palabra y de la soberanía popular, tuvo lugar un debate monográfico sobre una propuesta del parlamento autonómico catalán sobre el "derecho a decidir" de los catalanes y la petición de tres de sus representantes para que el parlamento español autorice una consulta en Cataluña para separarse de España. Las intervenciones de nuestro Presidente y del Líder de la oposición fueron brillantes, manifestando -lo que  todos preveíamos- que la soberanía reside en todo el pueblo español -no en una parte- según  ordena la Constitución en sus artículo 2. Han argumentado además que la competencia que reclaman para convocar referendos es imposible de transferir, porque no tiene contenido material. Que la democracia no consiste solo en votar sino en cumplir la ley que todos nos hemos dado en la Carta Magna. Que si no se está de acuerdo con ella puede ser cambiada, según establece ella misma en su articulado, pero mientras esté vigente hay que cumplirla y las autoridades hacerla cumplir.
De  todas las intervenciones que hubo ayer en el Congreso de los Diputados, me quedo con la participación de Rosa Díez por UPyD. Su discurso me pareció muy claro, contundente y pedagógico. Comenzó por recordar a Jordi Turull, Marta Rovira y Joan Herrera (representantes del Parlament) que "yo soy diputada nacional, como el resto de mis compañeros, también represento a los ciudadanos de Cataluña". A continuación criticó a los  parlamentarios catalanes que hayan traído al Congreso un discurso antieuropeo." "Menos mal que traían ustedes una posición común, porque si no no habríamos sabido a qué atenernos. Se habla mucho de identidad, de sentimientos..." Pero aquí no estamos para oír  ni hablar de sentimientos, que son personales e individuales, aquí estamos para hablar y defender los derechos de los ciudadanos. Lo que nos plantean es antidemocrático, pues es quitar derechos a los ciudadanos españoles para dárselos a los catalanes. "No es cierto que no haya opresión en Catalunya. Los ciudadanos no nacionalistas viven oprimidos". La democracia no es solo votar "también es decidir sobre qué no se vota y quién tiene competencia para votar". No todo lo que se vota, por el hecho de ser votado es democrático; depende lo que se vota. El ejemplo que pone Rosa Díez es ilustrativo "hemos decidido no votar sobre la pena de muerte o sobre la ablación de las mujeres" y también eso es democrático. Rosa Díez prosigue: "Diálogo y paz son las palabras más pervertidas de la historia. Todo el mundo está a favor, pero luego hay que ir a materia". Hablar en abstracto es fácil porque nadie en su sano juicio está en contra de estas palabras: todos queremos paz  y diálogo; el problema se plantea a la hora de concretar qué se entiende por paz y diálogo. Dialogar es bueno, como acción, pero hay que llenarlo de un contenido. Ha sostenido que "no hay nada que dialogar con quien incumple las normas, con quien lleva a gala no cumplir las sentencias de los tribunales y con quien no reconoce las reglas del juego". "El diálogo supone reconocimiento a las reglas del juego y con alguien que ha decidido no respetarlas no hay nada que dialogar". Tras señalar que a los "delincuentes se les persigue" y "se hace lo posible para que cumplan las sentencias", la representante de UPyD ha criticado que el presidente catalán Artur Mas no haya acudido al Parlamento a defender su posición: "El que ha recorrido 60.000 kilómetros para explicar su consulta en todo el mundo, no se ha enterado de que hay AVE a Madrid, que hemos pagado todos los españoles", ha apuntado con sorna. "Estamos hablando de aquello que Artur Mas no ha querido defender".

Tras arremeter contra la "falacia" que, a su juicio, supone el derecho a decidir, ha considerado un "fraude" que los representantes catalanes "digan que no van a respetar" lo que hoy diga el Congreso y ha defendido que "lo importante no es lo que se debate hoy, sino lo que ocurra mañana".
Para la portavoz de UPyD, el "discurso cutre y tan falso de que España nos roba" lo que pretende es "robarnos la España plural y democrática, en la que nadie nos preguntamos si somos más españoles o gallegos o más españoles o vascos -ha dicho-, porque nos importa un bledo". Rosa Díez terminó su alocución manifestando que este debate enmascara los problemas reales de los catalanes, que tienen que ver con la pobreza, el paro".