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domingo, 21 de julio de 2013

"Catalanes de mierda. No se merecen nada"





"El Ministerio de Asuntos Exteriores ha "apartado de sus funciones" al director adjunto de Marca España, Juan Carlos Gafo, por insultar a los catalanes, al responder en su cuenta personal en Twitter a la pitada al himno nacional en la inauguración en Barcelona del Campeonato del Mundo de Natación, según han asegurado a ABC fuentes gubernamentales. El tweet de Gafo decía: "Catalanes de mierda. No se merecen nada". Hasta aquí la noticia de ABC Digital. Me parece de justicia hacerlo. Un representante del Estado no puede insultar a una parte de España; no puede ni debe hacerlo con nadie, aunque sólo sea por respeto a la mayoría de catalanes que se sienten españoles. Con toda seguridad que él no quería decirlo, pero lo ha dicho. Con seguridad que se refería a los nacionalistas catalanes, ladrones, manipuladores de la historia, arribistas y sembradores de odio y separatismo. De acuerdo, (su error: confundir la parte con el todo) pero no les demos la razón porque esto es lo que ellos quieren. Los catalanes son españoles y no se merecen estos  políticos que denigran a la población, en vez de resolver los verdaderos problemas que les aquejan. Bastante tienen por sufrir un gobierno soberanista que les manipula, les suplanta su identidad española, les engañan, les roba, para provecho propio, sin asumir su responsabilidad de gobierno. Bastante tienen por sufrir recortes y sacrificios por la mala gestión de sus gobernantes envueltos en esteladas idependentistas y anticonstitucionales, en patrias irreales, en construcciones quimèricas virtuales, que sirven de tapadera a  una clase política cuyo único objetivo es esquilmar al pueblo catalán y seguir en el tajo, en multar a sus comerciantes por rotular en español... Por  ello, lo coherente es la dimisión de éste señor que no ha sabido estar a la altura de su cargo.
Ahora bien, -dicho esto- habrá que pedir responsabilidades al gobierno de España, por qué en Cataluña se permite silbar al himno de todos los españoles, ultrajar a la bandera y menospreciar los símbolos identitarios de España con total impunidad. Ahora estamos cosechando lo que antes hemos sembrado: la inercia parasitaria del gobierno central contra los nacionalismos separatistas, y "el complejo de inferioridad" del gobierno del Señor Rajoy, a no saber o no querer aplicar las leyes del Estado de Derecho. Habrá que exigirles el mismo respeto, que  ellos demandan para sus símbolos identitarios autonómicos, con los símbolos constitucionales que democráticamente nos identifican. En esa estamos.




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