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viernes, 19 de octubre de 2012

EL TOILET




Los franceses primero construyen el "toilet" y después el "château" -me decía un colega francés- alabando la sagacidad de nuestros vecinos del norte para recaudar dinero y hacer negocios. Porque el arte en el turismo está muy bien, pero la naturaleza no espera a la cultura. ¿Quién no ha tenido un apretón en un momento inesperado y en un lugar inoportuno?. Los servicios públicos cumplen un papel importante para el bienestar de los ciudadanos equiparable a la de los restaurantes, porque no sólo el placer se consigue con la restauración si no con la eliminación de lo restaurado. ¿o no?
Viene esto a cuento -querido lector- porque el Ayuntamiento de Barcelona trata  de implicar a los bares de la ciudad para que pongan a disposición de los ciudadanos -sean clientes o no- los servicios de sus establecimientos para uso público. La polémica está servida ¿Deben asumir los restauradores dicha petición? ¿Han de mantener los servicios limpios y preparados asumiendo el coste económico de agua, luz, productos de limpieza etc, a cambio de nada? Como establecimientos privados con costes privados ¿han de asumir un servicio que compete a los ayuntamientos?
En el Ayuntamiento de Telde (Gran Canarias) ha cerrado dos aseos urbanos y ha retirado la contrata a la empresa de mantenimiento porque el coste mensual era de 20.000 euros cada uno. Hecho un estudio por los técnicos municipales, llegaron a la conclusión que el gasto sólo de papel higiénico por día era de 240 rollos. Una epidemia de diarrea de todos los ciudadanos del municipio sería necesaria para justificar dicho gasto y que todos los ciudadanos fueran a hacer sus necesidades en los dos servicios públicos. Por ésta cantidad más le valdría al municipio comprar periódicos para  todos los ciudadanos e ilustrarles, (eso sí, de todas las tendencias políticas) y una vez cumplida tan hermosa labor cultural, utilizarlos para otros fines menos nobles pero no menos necesarios. Con toda seguridad, conseguiría  ciudadanos más informados, aunque no sabemos si más limpios (todo dependería de la calidad del papel).
En los servicios de un restaurante de carretera había un cartel que decía: " Señores clientes, sepan que por el euro que cuesta un café con leche ensucian una taza, utilizan una  servilleta, gastan agua y electricidad, utilizan unos servicios, gastan papel higiénico, jabón y agua para lavarse, electricidad para secarse y encima se van con la certeza que el dueño del establecimiento se hace rico a nuestra costa". Pues eso.





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