Sueño de Reyes Magos

 


Sueño de reyes magos

Anoche mientras dormía
soñé bendita ilusión
que El Rey Baltasar venía
con toda clase de juguetes
en su repleto zurrón.

Los zapatos que dejé
al lado de un viejo fogón
estaban llenos de ceniza
pero no contenían carbón.

A su lado contemplé
con una inmensa alegría
ese nuevo gran camión
que vi en un escaparate
y me hacía tanta ilusión.

Junto a él estaba la espada
que usó el Cid Campeador
el escudo y la armadura
de aquel valiente señor
y un caballo de cartón.

Debajo de la chimenea, 
había un balón de reglamento,
una camiseta blanca
con el nueve en sus espaldas
de Don Alfredo Di Stéfano.

Por fin me sentía feliz 
el día de los reyes Magos
por una vez en la vida
se hacía justicia conmigo
colmándome de regalos.

De verdad los merecía:
de niño no era tan malo
en el fútbol era chupón
en la escuela me peleaba
guardando mi territorio
-y si terciaba-
batiéndome a pedradas.

Decía solo mentirijillas
que raudo y veloz confesaba, 
porque era monaguillo 
y tenía a Dios y el cura
vigilando a mis espaldas.

De pronto una voz aguda
con fuerza y desmesura,
un grito que cala dentro
y recorre todo el cuerpo,
me despertó:
!Levántate que es la hora
y hay que ir al colegio 
para aprender la lección!

   antonio gonzález