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jueves, 17 de junio de 2021

Kant, en Lecciones Preliminares de Filosofía




En un artículo maravilloso de mi querido y entrañable amigo Pablo Alcázar, se expone con especial maestría, la importancia de haber tenido como docente en bachillerato a un excelente profesor de filosofía. No le falta razón cuando glosa las excelencias de D. José Barrio, catedrático de filosofía de quien aprendió valores y principios en sus clases de filosofía en un instituto de Jaén. 
Yo no tuve la suerte de tener un profesor que marcara una impronta  o un ideal en mi vida. Tampoco sería honesto por mi parte evocar la figura de algunos de ellos olvidando al resto. Tuve varios profesores a lo largo de mi formación, que prendieron la llama de la vocación por el amor al estudio de la filosofía y su enseñanza, a quienes debo tanto: mi mayor gratitud a todos ellos.
Pero hoy quiero hablaros de un libro y su autor, que conocí y que impactó en mi formación filosófica y del que aprendí "el esfuerzo sistemático por  develar el eterno enigma que hostiga sin cesar la insaciable curiosidad del hombre que constituye la filosofía. Ella no se refiere a cuestiones ajenas a la vida y ante cuya solución, en uno u otro sentido, el hombre pueda permanecer indiferente. Es la vida misma, con sus angustias y sus esperanzas, que aparece comprometida en la pregunta y arriesgada en la respuesta. Porque los problemas últimos y totales no se limitan a arañar la epidermis: arrastran a nuestro ser y lo penetran íntimamente. De su solución, claramente determinada o apenas entrevista, depende el curso ulterior de nuestra existencia, su felicidad o su desdicha" (Prólogo del citado libro). 
Se trata de Lecciones Preliminares de Filosofía de Manuel García Morente, editado en Editorial Losada, Buenos Aires en 1938; a propósito de un curso dado en el Departamento de Filosofía de la Universidad de Tucumán. El libro trata sobre los problemas metafísicos y gnoseológicos, las cuestiones solidarias del ser y del conocer, en sus vicisitudes históricas,  ofreciendo una visión realista de la filosofía de Parménides, Platón y Aristóteles. Allí aprendí como nadie puede "bañarse dos veces en el mismo río", porque "todo fluye", según Heráclito; o como el movimiento es una aporía relacionado con los sentidos: Aquiles el más rápido corredor de Grecia nunca podrá alcanzar a la tortuga en una supuesta carrera... A distinguir la realidad de la apariencia a través de la idea platónica; a valorar la importancia de la verdad como principio ético frente al amiguismo servil, como hizo Aristóteles cuando contradijo a su maestro Platón: "Soy amigo de Platón, pero más amigo de la verdad". La prevalencia del "acto" frente a la "potencia", etc.
La claridad expositiva de García Morente, sin olvidar la profundidad que un curso de Departamento, puede ofrecer por su brevedad, me impactó. La exposición sobre el idealismo trascendental de Kant frente al racionalismo cartesiano o el empirismo inglés, es magistral. No he encontrado una exposición más completa que la que aquí se expone sobre la Crítica de la Razón Pura, el problema de los juicios sintéticos a priori o la deducción trascendental de las categorías.
Para terminar, contaros una anécdota sobre este libro. Cierto día andaba yo por los pasillos de la universidad con este libro bajo el brazo, cuando me crucé con mi profesor Don Mariano Álvarez Gómez, catedrático de metafísica de la Universidad de Salamanca, quien me dijo: Padilla, has elegido el mejor libro para entender a Kant. Lo que no sabía Don Mariano, era, las veces que este libro me sacaría de apuros a lo largo de mi vida profesional. Pero esto lo dejamos para otro día.



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